Plantas epifíticas. Tallo largamente rastrero, filiforme, 0,3 mm de diámetro, con tricomas sésiles, no unidos basalmente, flexuosos, rojizo-parduscos, brillantes, caedizos con el tiempo; raíces negruzcas, a tramos irregularmente distribuidas. Hojas distantes, pendientes, 1,5-5 cm de largo; pecíolo marginado en toda su extensión, 0,2 mm de diámetro, 1-1,5 cm de longitud con escasos tricomas similares a los del tallo, caedizos, o generalmente de apariencia glabra; lámina aovada, aovado-oblonga, 2-3-pinnatifida profundamente, 2-4 cm de largo, 1-1,6 cm de ancho; raquis marginado en su porción inferior, hacia arriba alado, pueden presentarse dispersos tricomas similares a los descritos, caedizos, generalmente glabro; pinnas hasta 9 a un lado del raquis, alternas; últimos segmentos oblongos o lineales-oblongos; ápice obtuso, frecuentemente emarginado, 0,7-1 mm de ancho; tejido membranoso, traslúcido, glabro, algo ondulado o crispado cuando seco; venación pinnada, libre, anádroma. Soros marginales, escasos (1-6 en los cubanos) siempre en el ápice de la hoja, conspicuos en comparación con el tamaño de la planta; indusio bivalvar, medianamente inmerso; valvas obovadas, de margen hacia su porción apical ondulado-rizado; ápice agudo o ligeramente obtuso, ca. 2 mm de largo, 1,5 mm de ancho, generalmente más anchas que el segmento que las porta; receptáculo robusto cilíndrico-cónico, levemente exerto.A