Plantas perennes, herbáceas o leñosas, lianas o arbustos, rizomatosas. Hojas alternas, simples, enteras o lobuladas, usualmente de 3 a 7 nervios primarios; margen plano o revoluto; hojas pecioladas, en ocasiones con pseudoestípulas. Inflorescencias tírsicas o racemosas, terminales y frondosas o laterales y bracteosas o flores solitarias; en las especies cubanas las flores son solitarias, zigomorfas, axilares, pedunculadas, rectilíneas o geniculadas, frecuentemente fétidas. Perigonio con porción basal hinchada que corresponde al utrículo, a continuación, se estrecha en forma de tubo, en la porción apical se ensancha formando el limbo perigonial; limbo 1-3 lobulado, en ocasiones con apéndices filiformes capitados o no. Ginostemo en el interior del utrículo, 5 ó 6 lobulado, proterógino (Costa 1981). Estambres 5 ó 6; anteras adnatas al ginostemo; en las especies presentes en Cuba las anteras son ditecales, tetraloculares de dehiscencia longitudinal. Polen inaperturado, tectados, esferoidales o ligeramente ovales; exina verrugosa o rugulada (Moncada 1985). Ovario ínfero, estrechamente cilíndrico, acostillado, 5 ó 6 locular; placentación axial; óvulos numerosos, anátropos. Fruto en cápsula 5 ó 6 locular; dehiscencia septicida, septífraga o septífraga marginal, acrópeta o basípeta. Semillas numerosas, generalmente planas, comprimidas verticalmente en 5 ó 6 hileras; en las especies cubanas las semillas son generalmente ovoides; en ocasiones con un ala marginal; con o sin arilo; la superficie de la misma puede ser verrugosa; la rafe se dispone a lo largo de la línea media de la cara adaxial, prominente, promínula o dilatada con prolongaciones membranosas; diseminación anemocora o zoocora.
A,B